martes, 7 de mayo de 2024

El arte de hacerse invisible

El préstamo interbibliotecario es un servicio muy útil por cuanto permite obtener fuera lo que no se tiene dentro. Más que útil, imprescindible en un contexto en el que es imposible tenerlo todo. Tratar de tenerlo todo es insostenible.

Más que competir por ver quién tiene más, hay que cooperar, coordinar las suscripciones y compartir los contenidos. Esta es la lógica que debe guiarnos.

No todas las bibliotecas tienen el servicio de préstamo interbibliotecario operativo. Las hay que solo nominalmente. No así nuestra biblioteca. En nuestra biblioteca este servicio funciona desde antiguo, si bien es cierto que bajo presupuestos distintos.

Antiguamente se pedía un artículo, generalmente en persona, se cursaba la petición y cuando la copia llegaba había que acudir a la biblioteca, pagar y solo entonces te podías llevar la copia impresa. Era un proceso largo y caro, sobre todo para los usuarios, sobre los que repercutía el coste de la petición. 

En la actualidad disponemos de un formulario donde si buscas por DOI o PMID el PDF del artículo se abre de forma automática caso de ser gratuito, haber sido publicado por una revista suscrita o haber sido servido antes, y si no, se cursa la petición y en el mismo día o al día siguiente el usuario recibe el PDF del artículo solicitado tanto en su correo corporativo como en su carpeta de peticiones de la biblioteca virtual, todo a coste cero. Sin personalismos, aunque haya personas detrás.